LLUVIA-VIENTO Y BARRO
Con la suerte de poder disfrutar del puente de La Constitución,y que mis hijos se quedaban por la tarde en casa de mis padres, tocaba sacar la bici.
Después de las últimas salidas en la que tuvimos diversas averías, unos y otros, tenía una espina clavada con por fin acabar una ruta completa.
Lloviera algo por fin por la mañana,y daba la impresión que la tarde estaría nublada sin precipitaciones.
Al ir solo, tampoco quería meterme al monte,y barajé la opción de la zona del embalse de Cecebre.
Frío no hacía ninguno, unos 12 grados, temperatura perfecta para darle a los pedales.Culotte, maillot,calcetines de verano y chubasquero a modo de cortavientos.
Salí del pueblo subiendo por Los Abelares, camino del Norte, dirección Piadela.
Se divisaban nubes negras por los alrededores de La Coruña, pero no por donde me dirigía.Cosa que a los veinte minutos,se había cerrado todo,y empezó a llover de lo lindo 😅.
La zona de Piadela a San Tirso, pasando por la ciudad deportiva del Depor hasta el embalse de Cecebre,es preciosa y poco concurrida.Luego por los alrededores del embalse,las pistas están ya muy machacadas,al igual que por el paseo del río Mero.
Aunque con el día que hacía,no me encontré a ningún ciclista,lo único a unas pocas personas de mediana edad disfrutando de la lluvia bajo sus respectivos paraguas.
Al principio,fui perdiendo algo de tiempo, parando y sacando fotos del entorno.... después con la climatología adversa, tocó pedalear.
La verdad que calculé mal el tiempo, la última vez que hiciera esa ruta, fuera en agosto.Ahora en diciembre,suele oscurecer antes y más con mal tiempo.Asi fue, que a las 18h15,ya no veía ni torta por algún que otro lugar donde no había luz artificial.Aun encima sin foco en la bici....a lo loco a ciegas, buscando los charcos para ubicarme.
Unos kilómetros antes de llegar por fin a casa,me estaba muriendo de hambre, acordándome de unas naranjas que podía haber cogido a principios de la ruta y guárdalas en el maillot.
Subiendo de Piadela al Norte, tuve un amago de calambres en ambos muslos,cosa que achaco al frío, lluvia y esfuerzo.Aun así pude llegar a casa,sano y salvo.
Ya dejé la bici en la bodega, al igual que la ropa en la lavandería.... barro hasta las orejas.
Después de la ducha, tocó cenar como un cosaco....a fame é negra.... como se suele decir aquí.
Hoy, después de poner la lavadora en marcha, acabar de redactar el blog, tocará limpiar la Mondraker y engrasarla, que la pobre también lo merece y lo necesita.
Fotos de la salida:
No hay comentarios:
Publicar un comentario