miércoles, 1 de noviembre de 2017

BOCELO-TUBOS-CARESMA-OIS-MONTE DO GATO-OZA-BETANZOS.


Unos días antes de esta salida,me llamó un conocido al ver que salíamos semanalmente por el monte en bicicleta.Suele salir en grupeta, tanto por carretera como por monte.Su idea era quedar con nosotros y sus colegas para hacer una ruta con nosotros.Sin problema, cuantos más, mejor.
Así que el domingo por la mañana, quedamos a las 8 h30 en el pabellón de Betanzos.
LEO, como se llama mi conocido,vino con SANTI y WILLY, juntándose así con MIGUEL y su sobrino ALBERTO.
Arrancamos los 6, cara al campo de Los Caneiros y a continuación la subida al Bocelo.
Llegados a la cima, resulta que ellos, nunca bajaron por esa zona,y se nos colaron delante por nuestra bajada preferida.Resultado que fuimos como quien dice, con el freno de mano puesto, nunca bajáramos tan lentos por allí.
Después de la subida a los Tubos,y de cruzar el río Zarzo, tocaba la zona antes de Caresma...ahí tuvo un ligero bajón,el buenazo de ALBERTO.Nada serio, menos mal.
La bajada de Caresma cara Ois,ya me adelanté a la grupeta, para poder disfrutarla plenamente.
A continuación, subimos cara a Oís,y WILLY se alegró que no fuéramos por otra zona mucha más complicada por su desnivel.
Una vez en el monte do Gato,LEO intentó por varias veces franquear una zona de piedras con su 26,y a la tercera,lo consiguió.
Después de disfrutar de varios senderos de esa zona, ALBERTO,nos enseñó una bajada nueva.Realmente, creo recordar que ya la bajará en la anterior Ruta de Oza-Cesuras.
Una bajada muy trialera,repleta de piedras, escalones y zanjas.En resumido, para bajar y disfrutarla al máximo,cosa que hice al poco de empezar y rebasar a ALBERTO, que lo estaba haciendo de una manera muy lenta a mi gusto.
Después de esa gozada y algún susto al irse alguna que otra vez la rueda trasera, proseguimos cara a Oza.
Llegados al pueblo, hablamos de parar a tomar algo.Asi que tomamos sitio en la terraza,y nos pusimos las botas entre los callos y la tortilla.
A punto de irnos, apareció MARTÍN que saliera por libre y se volvía para casa, menuda sorpresa.
Que pereza a la hora de arrancar,ya con la musculatura fría y con más ganas de quedarnos.Nos despedimos de ALBERTO,y emprendimos la vuelta cara Betanzos por carretera.
Una divertida mañana con muy buena gente,y esperando pronto repetir experiencia.

Aquí os queda las fotos de la salida:










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